Se ha observado una reducción en el dolor, la fatiga y la depresión característicos de la fibromialgia, a partir del tratamiento con EMT
De acuerdo a los criterios médicos, la fibromialgia no es una enfermedad en sí misma, sino más bien un conjunto de síntomas que pueden controlarse. Se caracteriza por la presencia de dolor músculo        esquelético  crónico y generalizado, fatiga, problemas de sueño, de memoria y del estado de ánimo.
No es una enfermedad progresiva o degenerativa, ya que el cuadro clínico de los pacientes rara vez empeora con el tiempo y no existe afectación anatómica en los músculos ni en los huesos. Aun así, para algunas personas la fibromialgia puede resultar incapacitante debido a  la intensidad del dolor y  de los síntomas asociados al padecimiento.
Las mujeres son mucho más proclives que los hombres a contraer fibromialgia, siendo estas nueve de cada diez casos. El rango de edad en que generalmente se presenta oscila entre los 30 y los 50 años.
La afección puede aparecer después de algún traumatismo físico,   una infección, alguna intervención quirúrgica,  a causa de un grado de estrés significativo o simplemente presentarse sin causa aparente. También puede coexistir con otros tipos de artritis, lupus u osteoartritis. Otros síntomas asociados a este trastorno son:

  • Síndrome de intestino irritable
  • Migraña y otros tipos de dolor de cabeza
  • Cistitis intersticial o síndrome de la vejiga dolorosa
  • Trastornos de articulación temporomandibular

Aunque la causa específica de la fibromialgia es desconocida, estudios realizados al respecto sugieren que las personas que la padecen sufren de una alteración en el sistema nociceptivo, que es un área del sistema nervioso que regula la percepción y la respuesta al dolor.
El tratamiento consiste únicamente en reducir el dolor y mejorar el estado de salud en general. Para ello son utilizados analgésicos, antidepresivos y anticonvulsivos. La fisioterapia, la terapia ocupacional y el asesoramiento psicológico pueden ser también de gran utilidad como aliados al tratamiento farmacológico.

A pesar de los esfuerzos por encontrar una cura para esta afección, la fibromialgia continúa siendo un trastorno crónico con muy pocos tratamientos disponibles en la actualidad. Datos derivados de investigaciones y pruebas clínicas  han encontrado una disfunción del sistema nervioso central y un desequilibrio neuroquímico que desencadena una mayor excitabilidad de las neuronas en pacientes diagnosticados con  fibromialgia. Por lo tanto, un enfoque prometedor para regular esta actividad cerebral anormal es la neuro-modulación, utilizando la EstimulaciónMagnética Transcraneal para tal fin.
Durante las sesiones terapéuticas, la Estimulación Magnética Transcraneal repetitiva se aplica a la parte del cerebro llamada corteza prefrontal dorso lateral, que tiene un papel clave en la regulación de la percepción del dolor. Esta región del cerebro también desempeña una función importante en las redes sensoriales, afectivas y cognitivas implicadas en la fibromialgia.

Esta nueva opción terapéutica consiste en una bobina conectada a un dispositivo que se coloca en la cabeza del paciente, induciendo pulsaciones magnéticas repetidas que a su vez modulan una serie de redes neuronales que favorecen el alivio de los síntomas. La terapia de EMT ha validado resultados positivos al reducir el dolor y mejorar el estado de ánimo y la calidad del sueño. Una mejora sustancial en la fatiga también ha sido un resultado relevante.

La Estimulación Magnética Transcraneal es indolora, no invasiva y no tiene efectos secundarios ni adversos.
Fuentes:
https://www.shcmedical.es/ventajas-de-la-estimulacion-magnetica-para-tratar-la-fibromialgia/